martes, 8 de abril de 2008

¡Gracias Katty!

¡¡Hola juventud!! No nos cansaremos de escribir si tenemos a jóvenes lectores que nos leen y nos envían sus mensajes. Cada día vamos creciendo. Tenemos que sumar más. No hay ninguna diferencia ni ningún privilegio. A todos y todas les estimo y considero como excelentes personas por sus potencialidades que tienen que ser descubiertas para demostrar nuestras capacidades y así podamos investigar y transformar nuestra realidad en bien de los demás; porque creemos que luchar por un mundo mejor para todos es posible, y no para un puñado de privilegiados. ¡Uno para todos y todos para uno!

El gesto de Katty es loable. A pesar que su mamá tiene problemas de salud, se ha dado tiempo para enviarnos un mensaje opinando sobre el problema social que atenta contra el Cuba, como es el pandillaje, amenaza para nuestra niñez y juventud.

Asimismo, agradecemos a Arturo Bringas por el reconocimiento que hace de la vida y gesta de Flora Tristán, digna mujer a quien rendimos homenaje con el siguiente escrito.

7 DE ABRIL: NATALICIO DE FLORA TRISTÁN
Percy Julián
“En nuestra época, las mujeres ponen al fin en su poesía su propia carne y su propio espíritu”
José Carlos Mariátegui


Tan dilecta escritora nació en París el 7 de abril de 1803. Un caso que engalana y justifica por qué abril es el mes de las letras peruanas. ¿Qué tiene que ver esta noble mujer con nuestro país? Al morir su padre en 1808, mediante argucias legales le despojaron de la herencia paterna. Muy joven ingresa a trabajar como obrera en un taller de litografía y, a los 17 años, contrae nupcias con el dueño del lugar donde labora. Tuvo tres hijos, pero una vida conyugal cargada de vicisitudes y sufrimiento. Logró separarse después de superar un intento de asesinato protagonizado por el padre de sus hijos. Luego trabaja como criada de una familia en Inglaterra. Va acumulando en su vida injusticias y malos tratos.
Llegó al Perú en 1833 para reclamar su herencia que estaba en poder de su tío Pío Tristán, un militar del Ejército Libertador de Simón Bolívar. El tío la acoge y le fija una austera pensión, con la cual puede mantenerse en Lima; donde se sorprende al ver que todavía existían esclavos, sistema injusto e inhumano que ya había sido abolido en Francia; así como la forma cómo trataban a los indígenas. Estas vivencias las escribe en Peregrinaciones de una paria. Obra en la cual denuncia la explotación del hombre por el hombre, y exige un trato justo para ellos en torno a una nueva sociedad peruana, que se creía se estaba forjando en la denominada República.
Retorna a Francia e inicia la lucha por los derechos de las mujeres, que se plasma en La emancipación de la mujer; del mismo modo se embarca en el maravilloso y gratificante acto de exigir y luchar por los derechos de la clase trabajadora a través de Unión Obrera, donde se dirige a los trabajadores de la manera siguiente:
A vosotros, obreros que sois las víctimas de la desigualdad de hecho y de la injusticia, a vosotros os toca establecer al fin sobre la tierra el reino de la justicia y de la igualdad absoluta entre la mujer y el hombre. Dad un gran ejemplo al mundo (...) y mientras reclamáis la justicia para vosotros, demostrad que sois justos, equitativos; proclamad, vosotros, los hombres fuertes, los hombres de brazos desnudos, que reconocéis a la mujer como a vuestra igual, y que, a este título, le reconocéis un derecho igual a los beneficios de la unión universal de los obreros y obreras”.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, más conocidas como las Floras, reconoce que:" Lo que más nos atrajo de Flora fue su rebeldía como mujer y la radicalidad democrática de su palabra por la justicia social y de género, contra la exclusión y la explotación”.

Nosotros queremos rescatar el mensaje que le dijera a su pequeña Aline:
¡TE HARÉ UN MUNDO MEJOR!