Jornada de lucha y práctica de lectura

¿Qué tiene que ver la jornada de lucha del 8 de noviembre con la lectura? Para algunos tal vez nada, para nosotros mucho. ¿Por qué? El ser humano aprende de su entorno y de sus vivencias, por eso que cuando ayer escuchábamos corear a los trabajadores textiles de San Jacinto:
¡Somos la nueva generación de la clase obrera!, exigiendo la reposición de los despedidos, nos hizo recordar uno de los libros que más impactaron en nuestra vida: La madre de Máximo Gorqui. Excelente y maravillosa novela símbolo de lucha, sacrificio, entrega y convicción revolucionaria de jóvenes obreros y una madre tierna y comprensiva. Mientras marchábamos recordaba e imaginaba hechos comparando con lo que estaba viviendo. Eso es lo maravilloso del gusto por la lectura, que te da conocimientos y vida placentera para abordar con alegría los sacrificios de la vida. Quien lee se sensibiliza y compromete con causas nobles, porque hasta la muerte es dulce cuando uno lucha por los demás. De tal manera que proseguimos con la noble tarea se seguir refexionando sobre la práctica de lectura, para que nuestros niños y jóvenes tengan las armas para luchar contra el analfabetismo funcional y consigan la libertad de nuestro pueblo, ya que la lectura te abre las puertas de la vida. ¡Vamos bien!